
Las relaciones sexuales, las ganas contenidas, no poder aguantar ese apetito sexual con nada ni con nadie, porque el acto de tener sexo con alguien debe convertirse en aquel vínculo que une al hombre y a la mujer por amor. La diversión, el entretenimiento y hasta la confusión de sentimientos puede distorsionar la manera de ver al sexo.
Bueno, el sexo por un lado, pero por otro está el hacer el amor. Cosas muy distintas, para mi criterio. Sexo lo puedes tener con varias personas y, tal vez, sin sentimientos de por medio. Pero el acto de encontrarse íntimamente con alguien y hacer de ese tiempo totalmente inolvidable, es hacer el amor. Después de todo un TE AMO no se lo dice a cualquiera.
Ustedes. Sí, tú. Aquel que no encuentras respuesta alguna para este problema. No te desesperes, tu pareja está en las mismas condiciones y con las mismas ganas de tenerte junto a ella para abrazarte, acariciarte y decirte cuánta falta le haces. Asegúrate de que estos apetitos no se vuelvan costumbre porque simplemente el sentimiento de amar se convertiría en una sencilla pasión.
El tiempo va a pasar y pasará volando porque mientras estés disfrutando de lo que está haciendo fuera de tu país y con la completa confianza a tu pareja, cada vez se irán disipando aún más esos pensamientos y apetitos. Te doy mi toalla. Para siempre.